Capítulo 1 de la serie “Nueve realidades ocultas del agua”
". . . . y el Espíritu de Dios se cernía sobre las aguas. (El Libro del Génesis, 1)"
Por lo tanto, el agua ya se interpretaba como conciencia pura en el Libro del Génesis I.
Del budismo se sabe que "ningún pez nada en agua estéril".
En los años sesenta, el profesor Louis-Claude Vincent, hidrólogo francés, habló de la influencia nociva mensurable del cloro y definió una escala de valores de partículas para el agua destinada a las obras hidráulicas francesas.
Sin embargo, las investigaciones sobre la dinámica de los vórtices realizadas por Viktor Schauberger a mediados del siglo pasado revelaron también que el agua puede tener necesidades minerales muy diferentes según la región y el origen.
A principios del nuevo milenio, el Dr. Masaru Emoto pudo visualizar por primera vez la belleza de la dinámica del agua. De repente, la energía del agua cobró sentido a través de su estructura visible.
Recientemente, el Dr. Gerald Pollak, de la Universidad de Washington en Seattle, pudo demostrar un nuevo estado agregado del agua que sólo puede medirse en su forma distintiva en la dinámica del agua en remolino. Se trata de una fina capa de agua, una zona gelatinosa que presenta esta estructura diferente en las superficies en contacto con el aire y otros límites. Esta es la zona de exclusión, la llamada agua EZ, que es el 4º estado agregado.
Ahora se sabe que se puede mejorar absolutamente cualquier calidad del agua mediante zonas de turbulencia implosiva. Incluso las aguas residuales que contienen sustancias químicas pueden mejorar gracias a la turbulencia. Esto ya se midió hace 20 años en aguas residuales altamente tóxicas de la industria papelera suiza.
Beber agua activada por turbulencias dinamiza todos nuestros procesos vitales. Lo sé por experiencia propia desde hace 25 años. Siempre he recomendado especialmente los baños completos con agua activada. Esta es la experiencia que tengo con el agua GIE desde hace años y que comparto con muchos usuarios del agua GIE.
Ahora he podido observar visiblemente una nueva dimensión de mi propia experiencia con el agua arremolinada en el agua de la piscina desde hace unos 2 años. Sólo ver la superficie lisa del agua como un espejo, sobre la que los insectos vuelven a caminar sin hundirse, es un espectáculo que no veía desde que era niña. El purificador Pool Tiger remueve el agua cada vez que pasa por el skimmer. Se lo recomiendo a todos aquellos que tengan piscina donde poder instalarlo. Durante los días de verano, no sólo se puede nadar en esta agua, sino simplemente sentarse y meditar. Es una relajación tremenda.
Para aquellos que no tienen esta opción, recomiendo bañarse en el agua GIE en la bañera. Esta relajación es tan grande que todo el mundo puede sentirla.
Marion Kuprat